Tras una conversación con Julius Shulman en diciembre de 2007, a menos de dos años de su muerte, me pareció interesante trabajar con el movimiento.
En 1912, a menos de dos años de su nacimiento, Balla realiza “Correa de perro en movimiento”. Desde entonces se ha trabajado mucho sobre ello.
En 1947, Shulman registra la casa Kaufmann en Palm Springs, con una exposición de 45 minutos, durante los cuales él va entrando y saliendo de la casa, encendiendo y apagando luces, abriendo y cerrando puertas a medida que evolucionaba el atardecer del desierto.
En 2009, el año de la muerte de Shulman, realizo “Lighting”, una serie sobre el movimiento. Ya no se trata de dejar la cámara quieta y registrar un objeto en movimiento, tampoco de fotografiar un cuadro estático y mover partes de la escena, ahora se trata de trabajar con el movimiento de la cámara. La cámara, en manos del fotógrafo, se mueve, esto es una realidad. La serie “Lighting” trabaja con el desplazamiento intencionado de la cámara.
En 2011, coincidiendo con el tercer aniversario de la inauguración oficial del Movimiento Disfrutista, decido completar la serie fotográfica lighting, donde la luz artificial quema la imagen a medida que el fotógrafo mueve la cámara, con una serie de pintura, donde una solución de hipoclorito de sodio transforma por oxidación las tintas oscuras del cuadro en líneas luminosas.
Esta serie se enmarca en la investigación "Supercotidiano", que se intenta nutrir del alto potencial de lo usual, aquello que a veces, por extremadamente ordinario, pasa desapercibido ante nuestros ojos. En este caso, la cotidiana luz artificial se convierte en el generador de acuerdos entre pintura y fotografía, eludiendo los marcos críticos convencionales de ambas disciplinas en un proyecto de exploración con sus propios sistemas de relaciones.